El Tribunal Supremo no considera que los gastos de gestión derivados de comprar o vender una vivienda (pago de impuestos, notaría, gastos de gestión o cancelación de la hipoteca) cuenten para no pagar la plusvalía municipal. Esta consideración choca frontalmente con la de la sentencia del Tribunal Constitucional, según la cual se podían incluir estos gastos para reducir la ganancia obtenida por la venta (y, por tanto, el importe del impuesto).
 
Es muy común que la venta de un inmueble resulte en una ganancia para el vendedor. Esto implica que se debe pagar la plusvalía municipal. Por eso, una práctica común es incluir los impuestos derivados de la transacción con el fin de acreditar una pérdida y eludir el impuesto.
 
El Supremo ha anulado esta práctica en una sentencia con fecha del pasado 16 de septiembre. Esta sentencia contradice la sentencia posterior dictada por el Constitucional a día 31 de octubre.
 
Por tanto, a día de hoy, el contribuyente debe comparar las escrituras de adquisición y trasmisión para saber si existe una ganancia o una pérdida, sin tener en cuenta los gastos que se asocian a la transacción.

Autoría de la imagen: Luis García (Wikimedia Commons)